El exceso de fe puede llevar al fraude: Ernest Haeckel

                     

La dama con vestido blanco y un sombrero en las manos es Isadora Duncan (1878-1928), una bailarina estadounidense de fama mundial. El caballero que la acompaña y que se protege de los rayos del sol con un sombrero es Ernest Haeckel, a quien vemos en otra imagen posterior pintando una acuarela del natural.

                                       

Un hecho que merece cierta atención es que, al principio, es decir antes de ser universalmente aceptado, Darwin encontró mayor audiencia en Alemania que en Francia. En su libro “Les transformations du monde animal”, Depéret nos lo explica porque en Francia dominaban las ideas y puntos de vista de Cuvier, opuesto a la transformación de las especies. Puede ser. Cierto es, también, que en Alemania el darwinismo pronto encontró dos apoyos incondicionales. Uno en Haeckel (1834-1919), otro en Weismann (1834-1914).

 Haeckel fue un tenaz defensor de las tesis darwinistas. Su legado incluye enormes árboles filogenéticos como el de la figura cuyo trazado revela, a menudo, una gran imaginación, característica que, si bien puede ser útil en muchas ocasiones, también por ser utilizada sin el debido freno, puede ser fuente de errores que el tiempo se encarga de ir mostrando.

                                            

 

A pesar de haberse trazado sin la base científica suficiente, los árboles filogenéticos de Haeckel tuvieron una enorme difusión y todavía persisten en muchos libros de texto y tratados de biología. En el curso del tiempo, el conocimiento científico ha realizado podas despiadadas en dichos árboles, que han afectado sobre todo a los troncos principales dejándo un resto como de árbol desarbolado, es decir convertido en montón de leña.

En su libro titulado “Les transformations du monde animal”, (1929), Depéret no sigue uno por uno todos los detalles de la evolución de todos los tipos incluidos en los esquemas de Haeckel, pero sin embargo sí examina con cuidado las bases paleontológicas sobre las que reposan algunas de sus deducciones. Dice, por ejemplo:

 

Le groupe des Protozoaires comprendrait des types á la fois plus simples et plus anciennes du Regne Animal. Haeckel suppose l’existence a l’époque Laurentienne des types se rapportant aux phases Monére, Morula, Planula et Gastrula. Mais ce sont la des simples vues de l’espirit ;….le seul fait d’observation géologique sur lequel s’appuie l’hypothese d’Haeckel, a savoir le fameux Eozoon canadense des gneiss laurentiens du Canada, consideré par Dawson et Carpenter comme un foraminifere geant, doit être ramené a l’état d’une simple structure mineralogique.

Que traduzco

 El grupo de los protozoos comprendería los tipos a la vez más simples y más antiguos del Reino Animal. Haeckel supone la existencia en la época Laurentienne de los tipos semejantes a las fases monera, mórula, plánula y gástrula. Pero esto son visiones simples del espíritu; …el único hecho de observación geológica en el que la hipótesis de Haeckel se apoya, a saber, el famoso Eozoon canadiense de los gneiss Laurentiennes, considerado por Dawson y Carpenter como un foraminífero gigante, se debe considerar una simple estructura mineralógica.

 
Algo parecido encuentra Depéret para la filogenia de esponjas, medusas y gusanos. Está construida sin base paleontológica y semejante es el caso de los moluscos.

 
En su aproximación a la evolución, Haeckel presume de seguir el método embriogénico. A menudo se le ha atribuido una teoría que no es suya sino mucho más antigua.  La Teoría de la Recapitulación procede del naturalista romántico alemán Oken y al intento de interpretarla adecuadamente dedicaron su esfuerzo muchos investigadores antes que Haeckel, haciéndolo a veces de maneras mucho más ricas y fructíferas que éste, así por ejemplo von Baer, el fundador de la embriología; pero por no ser darwinistas, sus visiones serias y producto de un concienzudo trabajo, duraron menos y no ocuparon en los libros los espacios ocupados por la de aquel.

 La Teoría de la Recapitulación indica que, durante su desarrollo embrionario, los animales van completando en orden sucesivo, las fases correspondientes a grupos taxonómicos a los que pertenecen, del más amplio al más restringido. Así, los embriones se comportan primero como corresponde a su grupo taxonómico superior, el phylum, luego a la clase, luego al orden, y así sucesivamente. Por ejemplo, el embrión humano, pasaría primero por una fase de vertebrado, luego de mamífero, pero no pasaría nunca jamás por fases de otros grupos, por ejemplo de articulados, moluscos o equinodermos.

 Haeckel simplificó la teoría diciendo que, la ontogenia repite la filogenia, términos ambos acuñados por él; pero esto es arriesgado ya que podemos tener acceso a la primera (ontogenia) pero no a la segunda. En manos de Haeckel, una teoría sólida procedente de la hoy denostada escuela de la Naturphilosophie, se convierte en una sobre-simplificación muy del gusto darwinista; en un recurso ilícito puesto que es precisamente la naturaleza de la filogenia lo que se pretende investigar.

 La Teoría de la Recapitulación era muy bien conocida por todos los zoólogos y naturalistas del XIX quienes sabían que debe ser utilizada con extrema prudencia. En su interpretación, Haeckel dibujó los embriones adaptando la escala a su gusto y exagerando los detalles que a él le interesaba destacar (ver las imágenes de abajo) y así, se ha demostrado en repetidas ocasiones (por ejemplo aquí y aquí), que muchos de sus dibujos y de sus composiciones gráficas reproducidas durante más de cien años, son fraudulentos. No obstante, los dibujos de Haeckel han aparecido y siguen apareciendo en multitud de libros de texto de enorme difusión (en la imagen por ejemplo la p 33 de la 3ª ed de Alberts, Bray, Lewis, Raff, Roberts y Watson; Garland New York 1994):

                                    

Haeckel era amante de los viajes y cultivador de una intensa vida social. El emperador de Egipto puso a su disposición un barco de guerra para sus investigaciones de los arrecifes de coral en el Mar Rojo. Escribió un relato de su viaje a Ceilán y se cuenta por ahí que organizó una peregrinación a la casa de Darwin que no gustó al maestro.

Tanto por su defensa del darwinismo, como por sus árboles filogenéticos que la historia se ha ido encargando de podar y hacer leña, y también por sus dibujos de embriones adaptados a su gusto, Haeckel tuvo un crítico sagaz en su época………..

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