Reinas de la Tierra: Doce enfermedades que cambiaron nuestro mundo. 1ª Entrega (de 2)

autor: Miguel Vicente

Creemos los humanos ser quienes gobernamos la Tierra, y la verdad es que alguien nos ha debido engañar. En la Tierra mandan los microbios, y bien claro queda al hojear el libro de Irwin W. Sherman “Doce enfermedades que cambiaron nuestro mundo”. De las doce, en diez los protagonistas son microbios. Todas han tenido, más que guerras y descubrimientos, efectos insospechados en la historia. Y algunas los acompañaron agravando su impacto sobre la humanidad.


La  portada del libro reproduce el cuadro «La peste en Roma» de Jules Elie Delaunay.



Sangre azul enferma: porfiria y hemofilia
De las doce enfermedades tan solo dos, la porfiria y la hemofilia no son enfermedades infecciosas. Se trata de enfermedades hereditarias, es decir que no se contagian de una persona a otra, sino que, lo mismo que el color de los ojos, se transmiten de padres a hijos. Las dos son enfermedades que afectan a las propiedades de la sangre. La porfiria, un defecto en el metabolismo de la molécula de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno por la sangre, la hemoglobina, provoca dermatitis, trastornos gastrointestinales y demencia. Son los síntomas que padecía Jorge III. El monarca británico en cuyo reinado se independizaron los Estados Unidos. Su enfermedad fue llevada al cine en la película “La locura del rey Jorge” (1994). Se dice que uno de los episodios de porfiria, que heredó de María Estuardo, pudo influir en agravar el conflicto entre protestantes y católicos en Irlanda cuyos efectos llegaron hasta nuestro siglo.


María, Reina de los Escoceses. Las infidelidades, traiciones y asesinatos que formaron parte de la vida de María Estuardo, se olvidan en la imagen romántica de una mujer a la que se muestra en el paisaje idealizado del palacio de Holyrood, al final de la Royal Mile de Edimburgo. The Royal Collection © 2004 Her Majesty Queen Elizabeth II.


La hemofilia, un defecto heredable en la coagulación de la sangre oculto en las mujeres y muy grave en los hombres, fue transmitida por la reina Victoria a sus descendientes, entre ellos a los descendientes de dos de sus nietas, la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII y abuela del actual rey de España y a Alix, la zarina esposa del zar Nicolás. Las dos eran portadoras de la enfermedad. No está claro cómo, sin antecedentes en su familia, la reina Victoria adquirió el defecto genético que produce la hemofilia, y tampoco lo está que la transmisión de la hemofilia al príncipe Alexis de Rusia y a varios hijos de Alfonso XIII tuvieran un papel decisivo en la revolución soviética o en la dictadura de  Franco, pero sí que fue un motivo de preocupación en los dos países que en nada ayudó a resolver sus conflictos del siglo XX.


La reina Victoria. Su reinado fue uno de los más largos en la historia reciente del Reino Unido y su política de alianzas conyugales, unida a la frágil salud de alguno de sus descendientes modificó la percepción que de su país tuvieron otras naciones europeas.



Un presidente católico

La patata, una planta original de Sudamérica extendida en Europa en el siglo XVIII, era un alimento básico de los irlandeses del siglo XIX. Tres temporadas, 1847 a 1849, en las que la patata fue atacada por el tizón tardío, causado por el hongo Phytophtora infectans que empieza por atacar las hojas de la planta y acaba pudriendo los tubérculos, agravaron la ya crítica disponibilidad de alimentos en Irlanda y provocaron la emigración masiva de los irlandeses pobres, en su mayor parte católicos, al Nuevo Mundo. Muchos, debilitados por la hambruna, fallecieron, víctimas de varias enfermedades, a bordo de los llamados barcos ataúd. Los que sobrevivieron se asentaron en Canadá y los Estados Unidos en donde uno de cada diez habitantes lleva sangre irlandesa. Sin sus votos quizás John F. Kennedy, hijo de un irlandés y católico, hubiera tenido más difícil ser elegido en 1960 presidente de un país con mayoría protestante.


Comedores de patatas. Cuadro pintado por Van Gogh en 1885 que retrata los ambientes de finales del siglo XIX en los que, por su buena adaptación a zonas frías y húmedas la patata era la base de la alimentación. La localidad es Neunen, en Los Países Bajos. Van Gogh quería mostrar un ambiente campesino en el que las mismas manos que trabajan la tierra son las que se llevan el alimento a la boca.



La plaga secreta

Las epidemias de cólera no son algo del pasado, el cólera, una enfermedad producida por una bacteria, todavía causa estragos en muchos lugares del mundo en desarrollo. Angola en 2006 sufrió una de las últimas epidemias con 1800 víctimas mortales. Hasta que John Snow encontró en 1854 que los que enfermaban de cólera bebían agua de fuentes contaminadas por aguas fecales se pensaba que la causa del cólera eran los miasmas de las atmósferas insalubres. Robert Koch demostró en 1884 que era producido por una bacteria, Vibrio cholerae, que ya había descrito el italiano Filippo Pacini en 1854. El cólera sirvió a finales del siglo XIX para establecer medidas de cuarentena en la inmigración a Estados Unidos de judíos rusos, su eficacia parece dudosa, pero lograron aplacar a la opinión pública y lamentablemente rebajar los flujos migratorios de personas poco favorecidas. Pero también fue determinante en mejorar el alcantarillado, el suministro de agua potable y los hábitos higiénicos en general, así como para desarrollar las prácticas modernas para el cuidado de los enfermos.


Muerte en Venecia. A las tribulaciones de Gustav von Aschenbach, interpretado en 1971 por Dirk Bogarde en la película de Luchino Visconti, se une la epidemia de cólera que es mantenida en secreto por las autoridades de la ciudad. La explicación oficial, el Sirocco, prolonga la teoría de los miasmas como causa de la enfermedad.


La peste negra
La peste bubónica o peste negra, causada por la bacteria Gram-negativa Yersinia pestis, se desarrolla en las ratas y se transmite a los humanos por las pulgas que se infectan al vivir en ratas enfermas. Es una de las bacterias más letales conocida, la dosis que por vía intravenosa mata al 50% de los ratones de experimentación es de solo una bacteria. La infección se puede propagar también por el aire, ya que la peste puede invadir el aparato respiratorio. La peste negra sirvió de pretexto a Boccaccio para situar la acción del Decamerón, pero la epidemia entre 1346 y 1352 redujo la población europea en un 20%. Los cambios afectaron en profundidad a todo el tejido social, incluso la restricción en los viajes provocada por el temor a enfermar pudo impulsar la creación de universidades y escuelas locales.


Napoleón en el hospital de apestados de Jaffa. La peste negra fue una amenaza que mantuvo ciudades aisladas y enfermos recluídos. El cuadro de Antoine-Jean Gross muestra la escena del 11 de marzo de 1799.


Enfermedad romántica
No es seguro que el cambio de la cultura de recolectores a la de agricultores y ganaderos sea el origen de que un microorganismo del suelo que infectaba al ganado o a la caza cruzase la barrera de las especies para infectar a las personas. Al parecer Mycobacterium tuberculosis tuvo un origen anterior en el ser humano que su pariente Mycobacterium bovis en los bovinos pero en ambos es una peligrosa enfermedad.  No le va la tuberculosis muy en zaga a la peste, unas diez bacterias pueden ser suficientes para producir la enfermedad. La tuberculosis, pese a su gravedad, ha quedado ligada al romanticismo. No solo se la asociaba a la vida bohemia y libertina, sino que el enfermo de tuberculosis ejerció un inexplicable atractivo erótico que inspiró obras como La Dama de las Camelias de Dumas, a la que siguieron óperas como La Traviata (La extraviada) de Giuseppe Verdi  y La Boheme de Giacomo Puccini. La tuberculosis es en realidad una grave enfermedad que agota al enfermo cuyo aspecto en sus fases terminales en nada se asemeja a la imagen erótica de Violetta Valery y Mimi, las protagonistas de las óperas del romanticismo. El reconocimiento de que la tuberculosis es una enfermedad contagiosa producida por el bacilo de Koch (ver biografía) produjo una reacción muy estricta, se dictaron en el pasado siglo unas medidas preventivas que afectaron en gran parte a inmigrantes y personas desfavorecidas, se hizo asimismo obligatorio en muchos casos el examen por Rayos X, bien para obtener un trabajo o un visado y se construyeron hospitales especiales (sanatorios) para paliar los efectos de la enfermedad. En la España de posguerra el “día de la flor” obtenía fondos para la lucha antituberculosa. Tal cuestación parece que se originó en San Sebastián en 1912 y no deja de ser interesante una vez más la asociación de la enfermedad con la imagen romántica de la flor.


La Traviata, imagen romántica de la mujer atractiva y accesible. Ilustración que muestra a Violetta Valery, la protagonista enferma de la ópera de Verdi, por Rafal Olbinski.


Las otras seis plagas que cambiaron el mundo
De otra enfermedad producida por una bacteria, la sífilis, de la malaria, causada por un protozoo y de cuatro enfermedades virales tratará la segunda entrega de esta reseña.



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4 comentarios

  1. Buenas

    Realmente interesantes las últimas entradas pero está claro que la "mala fama" vende. Personalmente creo que el microorganismo que más ha influido en la historia de la humanidad es la levadura Saccharomyces cereviseae. Pero como suele decirse, las buenas noticias no venden periódicos (o libros).

    Un saludo

    http://curiosidadesdelamicrobiologia.blogspot.com/

  2. Extraordinario aporte resumido el conocimiento. Espero con ansias la segunda entrega.

    Gracias por este esfuerzo.

    Luis

    Médico de la Familia

    Cuba

  3. Sumamente interesante el estudio de las plagas que han asolado la humanidad en particular la peste ha sido la más temida,; la influenza española en los años 40 0 50 que dejo 20 millones de victimas y seria muy importante las plagas que diezmaron a los los nativos durante la conquista de Amarice ese seria un capitulo muy importante.Por lo que respecta a las bacterias me ha llegado un estudio científico de Estados unidos donde ya se comprobó que existe 10 bacterias por cada celula humana.
    Gracias y espero seguir recibiendo su interesante material.

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