Lecturas románticas IV: Luis Montiel, una visión actual de la medicina romántica

En las entradas anteriores hemos venido tratando acerca del romanticismo alemán. Desde el principio decíamos que sus puntos de vista y planteamientos son bien diferentes a los que abundan hoy en día, y poníamos como ejemplo, la especialización actual en las ciencias, tan opuesta el espíritu romántico. El principal interés para estudiar hoy el romanticismo y el objetivo de acercarse a sus textos no consiste en acumular detalles acerca de un movimiento antiguo o tan diferente al pensamiento actual, sino más bien en lo contrario; es decir, que, por vivir en un Mundo en buena medida desconocido y lleno de paradojas, en el cual es bien sabido que los extremos se tocan, quizás un estilo de hacer ciencia tan opuesto al romanticismo como el que estamos viviendo en las últimas décadas, pueda estar próximo, o incluso anunciar una evolución inmediata hacia un neo-romanticismo.

En cualquier caso, comprender la historia de la ciencia será siempre fundamental y, es bien sabido que este intento por comprender, puede resultar en descubrimientos interesantes y sorprendentes, como consecuencia de aquella cualidad paradójica del Mundo. El avance de la ciencia no es tan simple como una progresión lineal desde un estado de desconocimiento hasta momentos de mayor erudición, sino algo mas complejo e influenciado por los factores, a veces enigmáticos, del entorno. El conocimiento del Mundo no es cosecha que vaya siempre aumentando linealmente sino que, por el contrario, está sometido a múltiples influencias que incluyen modas y reflejos desde puntos de vista altamente variables poniendo de relieve aspectos sorprendentes. Hoy no es frecuente en los entornos académicos hablar de fenómenos de curación mágica, magnetismo animal, posesión demoníaca, adivinación o profecía, pero estos y otros más fueron el objeto de estudio de cuidadosos médicos y científicos del pasado, quienes dedicaron sus vidas al análisis metódico de pacientes con una sintomatología que, aunque comparta aspectos esenciales con casos actuales, era explicada de manera bien diversa.

Pero el panorama lineal que, a menudo artificialmente, parece presentar la actual y, en gran medida reduccionista, versión en boga de la historia de la ciencia, induce a error. La correcta comprensión de la ciencia actual requiere el conocimiento de sus orígenes que se encuentran en un Mundo, aunque todavía no demasiado lejano en el tiempo, ya antiguo. Si, ya antiguo; aunque todavía reciente: más que nada antigüo por ser anterior al establecimiento del duro yugo del materialismo actual y mucho más espiritual que éste.

En sus obras tituladas “Daemoniaca (Curación mágica, posesión y profecía en el marco del magnetismo animal romántico)” y “Kleksografías”, Luis Montiel, profesor de Historia de la Medicina en la Universidad Complutense de Madrid, presenta un análisis metódico y cuidadoso de la obra de dos médicos del romanticismo alemán de la primera mitad del siglo XIX: Justinus Kerner y Dietrich Georg Kieser. La primera de las dos obras presenta un sumario de las actividades de ambos médicos. En el caso de Kerner se concentra en algunos, principalmente dos, de sus casos más conocidos: el de la vidente de Prevorst y el de la muchacha de Orlach. En un mundo dominado por una visión materialista y experimental de la ciencia resulta muy importante poder acceder a los análisis médicos de casos clínicos del pasado en los que la medicina tenía planteamientos menos basados en protocolos experimentales que hoy y más profundamente enraizados en otro tipo de tradiciones, costumbres y creencias. El doctor Montiel, cultivando un estilo que en sí mismo es neo-romántico, se ha tomado la molestia de presentar en su trabajo un análisis metódico de cada caso en el que quedan bien definidos los datos procedentes de las publicaciones originales de los doctores Kieser y Kerner y diferenciados de otras fuentes de información.

El análisis de las kleksografías, manchas de tinta en las que Justinus Kerner deja volar su imaginación es el objeto del segundo libro, otra hermosa y sugerente muestra del pensamiento romántico que sirve, cuando menos a la importante función de abrir ventanas a un Mundo diferente, si bien no tan remoto ni para nada ajeno a éste en cuyos ejes de coordenadas cartesianas nos movemos actualmente.

Ante la visión actualizada de un paisaje tan original y necesario para revigorizar el panorama científico actual; tan cuidadosamente preparado como el que el profesor Montiel nos presenta en estas sus dos obras, sólo nos queda repetir aquí la frase que él mismo ha elegido para presentar su obra Daemoniaca: Nun, liebe Kinder, gebt fein Acht!………………………..

(Ahora, queridos niños, prestad mucha atención!…………………………..).

Bibliografía.

Montiel L. 2004. Kleksografías. Justinus Kerner. Ed MRA. Barcelona.

Montiel L. 2006. Daemoniaca. Curación Mágica, Posesión y Profecía en el Marco del Magnetismo animal Romántico. Ed MRA. Barcelona.

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